El cero no es solo un concepto matemático, en física y filosofía también tiene un papel importante. Se trata de una forma de representar la nada y su invención demostró la grandiosa capacidad del razonamiento humano.
Cálculos matemáticos, leyes de física y programas informáticos necesitan el cero para reflejar la realidad. Los humanos se dieron cuenta que para contar y utilizar bien los números, hacía falta entender que había cuando no había nada.
Las funciones del cero
Se puede decir que el cero tiene dos funciones. La primera es la de representar la nada. Si un niño tuviera diez caramelos, y se comiera todos –los diez-, le quedarían cero, es decir, no le quedaría nada. La otra función es la de ocupar el sitio cuando no hay nada y dar paso al siguiente decimal. Si en un número no hay decenas, pero si centenas y unidades, utilizaríamos el cero en esa posición. Por ejemplo 204, dos centenas, cero decenas y cuatro unidades.
El cero es el único número real que no es positivo ni negativo, y tampoco es par ni impar. Y no terminan ahí sus curiosas características, cualquier número multiplicado por 0 es igual a 0 y cualquier número elevado a 0 es igual a 1.
¿Y si queremos dividir entre cero?
En matemáticas, la división entre cero es aquella en la que el divisor es cero y está considerada una «indefinición», originando paradojas matemáticas ya que no tiene un valor definido.
En física, existe el cero absoluto. Un concepto que se utiliza para la temperatura más baja que se puede alcanzar. Corresponde con el cero en la escala de temperatura Kelvin, que equivale aproximadamente a 273 grados centígrados negativos.
Es difícil determinar el origen del cero, ya que existen evidencias de su uso en varias civilizaciones. Quizá, tal y como lo usamos hoy en día, lo hemos heredado de los árabes, a través del matemático italiano Fibonacci. El cero que importó de los árabes, y estos a su vez de los matemáticos de la india le convierte en un elemento neutro en la suma y se inserta en el sistema numérico posicional.
Excelente.
El cero es un número par, como se puede demostrar mediante pruebas formales, pero una muy intuitiva es que sigue la sucesión de números … 6, 4, 2, 0, -2, -4… Por lo demás, acabo de descubrir la página y me parece una maravilla.