Tsunami en japonés significa ola de puerto. Su potencia y poder destructivo es tan aterrador, que son la preocupación de millones de personas que viven en zonas costeras de todo el mundo.
Un tsunami es una serie de grandes olas del mar causado por movimientos que provienen de terremotos, desprendimientos de tierra, erupciones volcánicas, glaciares que se desprenden y meteoritos. Sin embargo, la mayoría de los tsunamis son causados por terremotos.
Las olas de un tsunami son pequeñas y distantes cuando están en el océano profundo y según se acercan a la costa, aumentan de altura y se acercan.
El 26 de diciembre de 2004, un gran terremoto con un epicentro frente a la costa oeste de Sumatra, (Indonesia), generó un gran tsunami en el Océano Índico, matando cerca de 230.000 personas en 14 países e inundando las comunidades costeras con olas de 30 metros de altura.
Un tsunami puede ocurrir en cualquier océano, mar o gran masa de agua, pero la gran mayoría ocurre en el Océano Pacífico, alrededor del «Anillo de Fuego», una zona geológicamente activa de la corteza terrestre donde se originan muchos terremotos. Aunque no hay forma de predecir cuando se va a producir un tsunami, existen sistemas de alerta que intentan proteger la vida de las personas.
El sistema de boyas DART tiene un sensor que toma mediciones de la altura del agua en los océanos y es capaz de retransmitir información en tiempo real preparada para activar una alerta de tsunami.
Es importante entender los sistemas de alerta para reducir la pérdida de vidas y propiedades que causan los destructivos tsunamis.
El Proyecto “Más Educación, Menos Riesgo” diseñó Tanah: contra los terremotos y tsunamis, una aplicación para concienciar a los más jóvenes sobre la importancia de estar preparado para enfrentar una emergencia.
Fuente: World Meteorological Organization (WMO)